top of page

Ante la duda, ¡sí!

¡Hola!


Te pregunto ¿Que te limita?, ¿Qué te frena?, ¿Qué te hace sentir ese miedo de quedarte parada?, ¿Por qué dices no y decides “no” hacerlo? Te pregunto, ¿Acaso los miedos, realmente tienen una connotación negativa?, o tal vez usamos nuestra justificación constante para decir “tuve miedo”, “tengo miedo”. Ante la duda, sí. ¿Y porque no? ¿Qué es lo que no te hace decir sí?

Cuántas veces habrás querido ir a esa cita que nunca llegaba y tenías miedo de proponerla tú. Cuántas veces habrás querido irte de viaje, y no tenías con quién, porque ir sola no era opción. Cuántas veces quisiste ver una película, pero ir sola al cine podía parecer que te plantaron o podrías sentirte muy solitario. Cuántas veces quisiste dejar de carrera, pero tenías miedo de ser un fracaso para los demás, y a raíz de eso seguiste un camino de infelicidad por miedo a que dirán. Cuántas veces seguiste una relación solo por comodidad, por acostumbrarte a una rutina, de tener… de compartir y así te fuiste de vos, te limitaste a no sentir más montañas rusas de emociones. Cuántas veces no dijiste lo que tenías que decir por miedo a ser juzgada, por miedo a ser rechazada, o simplemente por sentir que nadie te iba a escuchar.



Cuántas veces no te tomaste un café sola, porque es raro sentarse en una mesa que tiene dos sillas, y no tener a nadie físico enfrente; porque enfrente podías tener todo lo que querías si te permitías esa capacidad de “mirar”. ¿Cuántas veces dijiste no? o, mejor dicho, ¿Cuántas veces dijiste sí? Llegamos a convertir el “si” en algo muy selecto, algo muy profundo y decidido. Así mismo, dejamos de ser espontáneos, de hacer locuras, de vivenciar aventuras, de creer en que todo lo que vayamos a vivir tiene que ser meditado y planeado. Te pregunto, ¿Acaso eso es la libertad? ¿Acaso eso te hace sentir libre?


Ante la duda, sí.


Porque todo lo que es para uno lo encuentra, aunque no creamos que algo puede funcionar, o resultar bien.

Todo nos puede romper, pero también todo nos puede hacer sentir vivos. Si todo gira alrededor de mil preguntas, di sí. Es mejor saltar y sentir que vuelas y caer, que quedarte una vida posponiendo, y en el transcurso, posponerte.



Sé que muchas veces el miedo nos paraliza, nos deja quietos, y lo peor es que empezamos a huir de todo lo que “creemos que no resultara bien”, escapamos de todo; pero lo verdaderamente importante es que empecemos a entender que el único viaje que debemos hacer, es dentro de cada uno. A mí me pasaba a menudo, pero desde que empecé a ordenarme de adentro hacia afuera, logré limpiar mis pensamientos y mis hábitos. Y lo más importante, intenté entender que mi oscuridad y mi luz iban a estar conmigo siempre. Entonces empecé a trabajar en mí y dejé de escapar. Si no quieres repetir los mismos patrones, atraer los mismos maestros y repetir las mismas emociones.

Debes empezar el viaje más bonito hacia ti mismo🌸


¡Lindo Día!

Comments


© 2024 by Viviana Tapia. Proudly created with Wix.com

bottom of page